Capítulo 2

Capítulo 2

 ¿Tú? – dijimos ambos al unisonó, mientras en mi cabeza solo pasaban millones de cosas.



Bill: ¿Se conocen? –dije sin entender, pero ninguno de los dos respondía nada solo nos observábamos con furia - ¿Chicos?


Tom: Claro que la conozco, por desgracia – abrí mis ojos con impresión mientras me cruzaba de brazos.


Sophie: Quien habla. “Persona que no respeta las colas” – dije con ironía mientras en sus ojos solo había molestia – eres tan insoportable.


Tom: ¿Qué? – Dijo burlón – no me digas Bill que está loca te agrada – ambos observamos al chico pelinegro. Pero el simple nos miraba con dudas en su rostro….parecía no entender nada.


Bill: No entiendo que sucede…. ¿Ustedes se odian? ¿Tom porque no me contaste que la conocías?


Tom: ¡Porque hoy nos conocimos! – Dijo gritándole a su hermano – en el bar de malteadas.


Bill: Vale que no me grites – dije serio. Ninguno dijo nada, así que sin dudarlo pensé que alejarme de ahí sería mejor. Solté un suspiro y levantándome de mi asiento le sonreí a Bill.


Sophie: Debo irme, mis amigas me han de estar buscando como locas – dije sonriendo – pero fue genial conocerte….igual a ti. – observe a Tom, quien me observaba extraño y al despedirme solo hacia una mueca en su rostro.


Tom: No puedo decir lo mismo – soltó, luego de que yo ya me encontraba de espaldas. Pegue un tremendo suspiro para tranquilizarme y no salir corriendo tras de él. Se las estaba buscando.


Sophie: No te preocupes, que no siempre digo la verdad….es simple educación – dije observándolo directamente a los ojos luego de regresar a cerca de él – yo si tengo.


Me observo con los ojos como platos. Podía ser una furia cuando me provocaban y este chico estaba rebasando mis límites. Escuche como Bill soltaba una pequeña risita y Tom simplemente bufaba molesto…me encantaba esto.


Decidí en dejar de lado todo esto y encaminarme al hotel pues las chicas ya no estaban donde estábamos antes. Llegue a la habitación unos 10 minutos después, pero no había nadie. Así que pensé que lo mejor era esperar a las chicas y como mañana partíamos comencé a guardar todo en las maletas.


¿Estás por aquí Sophie? – escuche la vos de Gen, que provenía de la entrada. Seguro ya había llegado – Aquí estas – susurro llegando a mi habitación.


Sophie: Hola. Las busque en la playa pero….ya no las encontré – Gen sonrió traviesa mientras llevaba una mano a su cintura y me ayudaba a guardar ropa en la maleta.


Gen: Veras, con Lara fuimos a buscarte luego de un rato que no volvías y conocimos a un chico genial – dije guiñando uno de sus ojos - Es genial y quiero que lo conozcas.


Sophie: ¿Sera mejor que no me valla tan seguido no? – dije en broma. Mientras Lara entraba en la habitación y se sentaba con nosotras.


Lara: Andreas nos invito a la Feria del muelle…hoy por la noche – soltó con una emoción inaudita. Supuse que ese era el famoso chico.


Sophie: ¿Entonces irán? – Dije observándolas – tienen que ponerse guapas.


Gen: Estas loca. Tu también vendrás – abrí mis ojos con impresión, mientras ambas solo reían fuertemente y se acercaban al armario a ver que se podrían poner – Andreas nos dijo que llevará a algunos amigos, así que tienes que venir.


Lara: Si tan solo lo vieras Sophie….es un chico guapísimo.


Sophie: Esto me huele a amor – dije bromeando con Lara – Sera mejor que vea eso.


Y así continuamos toda la tarde. Buscando que ponernos y por supuesto nerviosas de quienes serian los demás chicos….era nuestra última noche y había que pasarla como se debía. Gen tomo un baño, mientras yo seguía charlando con Lara de lo lindo que le parecía Andreas…rubio, de ojos claro y de gran altura.


Luego de que estuviéramos bañadas y arreglándonos a medias, ayude a empacar todo a Lara y Gen. Era triste saber que todo se acababa, pero más para mi saber que eran las últimas horas con ellas…antes de la mudanza.


Gen: ¿Se ve bien esta falda? – dijo llamando nuestra atención. Lara asintió rápidamente para luego volver al baño y seguirse maquillando.


Sophie: A mí me gusta. Pero tal vez quedaría mejor con la blusa blanca – dije observándola bien.


Gen: Oh, ya la empaque – dije recordando – pero no importa, iré a buscarla.


Eran las 7:00 de la noche cuando las tres estuvimos lista y justo a tiempo la puerta de la habitación sonaba. Era hora de conocer al famoso Andreas y sus amigos.

Continuará.

                        
                                                    Majo, fallen Apart